Diamantes deslumbrantes: Trumpler 14
22/1/2016 de ESA Hubble
Esta imagen del telescopio espacial Hubble de NASA/ESA muestra el cúmulo de estrellas Trumpler 14. Crédito: NASA & ESA, Jesús Maíz Apellániz (Instituto de Astrofisica de Andalucia).
Las estrellas individuales a menudo pasan desapercibidas a causa de sus primas cósmicas mayores, pero cuando unen fuerzas pueden crear escenas realmente asombrosas que rivalizan con las nebulosas más resplandecientes o las galaxias más bellas. Esta imagen del telescopio espacial Hubble de NASA/ESA muestra el cúmulo de estrellas Trumpler 14. Se trata de uno de los conjuntos más grandes de estrellas calientes, brillantes y masivas de la Vía Láctea, que alberga algunas de las estrellas más luminosas de la galaxia entera.
Hasta ahora han sido descubiertos unos 1100 cúmulos abiertos dentro de la Vía Láctea, aunque se piensa que existen muchos más. Trumpler 14 es uno de ellos, situado a unos 8000 años luz de distancia hacia el centro de la conocida nebulosa de Carina.
Con solo 500 000 años de edad (una pequeña fracción de los 115 millones de años de edad del cúmulo abierto de las Pléyades) Trumpler 14 no es sólo uno de los cúmulos más poblados de la nebulosa de Carina sino también el más joven. Sin embargo, es rápido en aprovechar el tiempo que lleva de retraso, formando estrellas a un ritmo increíble y montando un extraordinario espectáculo visual.
Las estrellas expulsan partículas a alta velocidad desde sus superficies formando vientos intensos que escapan hacia el espacio. Estos vientos chocan con el material de los alrededores, causando ondas de choque que calientan el gas a millones de grados y que producen emisiones intensas de rayos X. Estos fuertes vientos estelares también pueden excavar huecos en las nubes de gas y polvo cercanas e incitar la formación de estrellas nuevas. Se sospecha que la peculiar nube con forma de arco visible en la parte baja de esta imagen es resultado de la acción de uno de estos vientos.