Descubierta la intensa emisión en radio de una estrella binaria diminuta que obliga a revisar los modelos estelares
25/6/2015 de Universitat de València / Astronomy & Astrophysics
Un estudio realizado por investigadores del Grupo de Radioastronomía de la Universitat de València ha determinado la masa de una diminuta estrella binaria gracias a sus intensas emisiones en radio -raras en estrellas tan pequeñas- que obligaría a revisar los modelos de evolución estelar.
En concreto, la pequeña estrella binaria es conocida como AB Doradus B y se encuentra en el sistema estelar AB Doradus que consta de dos pares de estrellas. Normalmente, las estrellas emiten luz que se puede ver a simple vista o a través de telescopios, pero algunas de ellas también emiten ondas de radio, similares a las de las televisiones, los teléfonos móviles o los microondas.
Estas emisiones han permitido el cálculo de la masa de esta estrella, un cálculo complicado, pero “cuando esta se encuentra en compañía de otra, su movimiento orbital nos proporciona una manera precisa de determinarla, tal y como dicen las leyes de Kepler”, afirma el director del Observatori Astronòmic, José Carlos Guirado, coautor de la investigación. “La masa de estas estrellas no puede ser reproducida por los modelos de evolución estelar actuales, lo que obliga a una importante revisión de estas teorías”, agrega el científico del Observatorio Astronómico.
El estudio del par Ba y Bb ha permitido descubrir que estas estrellas, como indica la investigadora Rebecca Azulay, directora del trabajo, “presentan una intensa emisión de ondas de radio que ha sido captada por las antenas del interferómetro australiano. Pero las estrellas brillan a longitudes de onda del visible y no demasiado en ondas de radio, entonces, ¿de dónde proviene tanta emisión?”, plantea la científica.
“La gran velocidad de rotación de cada una de las estrellas nos hace sospechar que tanto Ba como Bb son, a su vez, el resultado de dos estrellas en contacto en altísima rotación que se fundieron en un único objeto. Por ello, hoy en día, Ba y Bb aún giran sobre sí mismas con gran velocidad y producen intensas ondas de radio de la misma manera que la dinamo de una bicicleta genera luz cuando giran sus ruedas”, argumenta Azulay.