Curiosity «huele» la historia de la atmósfera marciana
1/4/2015 de JPL
Un miembro del equipo del experimento Análisis de Muestras en Marte (SAM de sus iniciales en inglés) en el centro de vuelo espacial Goddard de NASA prepara el banco de pruebas de SAM para un experimento. Esta copia de pruebas de SAM se encuentra dentro de una cámara que puede imitar la presión y temperatura a las que se encuentra SAM dentro del rover Curiosity en Marte. Crédito: NASA/GSFC.
El robot de exploración Curiosity de NASA está utilizando un nuevo experimento para comprender mejor la historia de la atmósfera marciana analizando xenón.
Mientras el rover Curiosity finalizaba su detallado examen de las capas de roca de las colinas «Pahrump Hills» del cráter Gale en este invierno marciano, algunos miembros del equipo del rover han estado ocupados analizando el xenón, un gas noble, de la atmósfera marciana.
Dado que los gases nobles son químicamente inertes y no reaccionan con otras sustancias del aire o del suelo, son excelentes rastreadores de la historia de la atmósfera. El xenón está presente en la atmósfera marciana en una cantidad muy baja y puede ser medido directamente sólo con experimentos in situ, como el Análisis de Muestras en Marte (SAM de sus iniciales en inglés) de Curiosity.
«El xenón es una medida fundamental a realizar en un planeta como Marte o Venus, dado que proporciona información esencial para comprender la historia temprana de estos planetas y por qué han acabado siendo tan diferentes de la Tierra», comenta Melissa Trainer, una de los científicos que analizan los datos de SAM. Medir el xenón nos dice más sobre la historia de la pérdida de la atmósfera marciana. Las características especiales del xenón – que existe en la naturaleza en forma de nueve isótopos diferentes, con masas atómicas que van desde 124 (con 70 neutrones por átomo) a 136 (con 82 neutrones por átomo) – nos permite conocer más sobre el proceso por el que las capas de la atmósfera fueron arrancadas de Marte mejor que empleando medidas de otros gases.