Cuestionado el mapa del Universo: las galaxias enanas no se ajustan al modelo estándar
12/6/2014 de Rochester Institute of Technology
Imagen en el óptico de la galaxia del Renacuajo, una galaxia en interacción, tomada por el telescopio espacial Hubble. El material arrancado de la galaxia durante su colisión con una galaxia más pequeña (que se ve en la esquina superior izquierda de la galaxia mayor) forma una larga cola. En esta cola de escombros se forman jóvenes estrellas azules, cúmulos estelares y galaxias enanas de marea. Crédito: NASA, Holland Ford (JHU), el ACS Science Team y ESA
La galaxias enanas que están en órbita alrededor de las galaxias la Vía Láctea y Andrómeda desafían el modelo actual aceptado de formación de galaxias, y los intentos recientes de meterlas con calzador en el modelo son imperfectos, según un equipo internacional de astrofísicos.
El estudio produce huecos en el paradigma actual sobre la formación de galaxias, y cuestiona el modelo aceptado del origen y evolución del universo. De acuerdo con el paradigma estándar, un 23 por ciento de la materia del universo está constituida por partículas invisibles conocidas como materia oscura.
«El modelo predice que las galaxias enanas deberían de formarse dentro de pequeñas concentraciones de materia oscura, y que esas concentraciones deberían de estar distribuidas aleatoriamente alrededor de su galaxia progenitora», afirma David Merritt, profesor de astrofísica del Rochester Institute of Technology. «Pero lo que se observa es muy diferente. Las galaxias enanas que pertenecen a la Vía Láctea y Andrómeda se observa que orbitan alrededor de enormes estructuras con forma de discos delgados».
El estudio, dirigido por Marcel Pawlowski de Case Western Reserve University, critica tres artículos recientes publicados por diferentes equipos internacionales, que concluyen que las galaxias satélite apoyan el modelo estándar. Ahora, este equipo de 14 científicos de seis países diferentes ha replicado estos análisis iniciales empleando los mismos datos y simulaciones cosmológicas, encontrando probabilidades mucho menores- aproximadamente de una décima de punto porcentual – de que esas estructuras sean observadas en la Vía Láctea y la galaxia de Andrómeda. «Los artículos anteriores encontraron estructuras en las simulaciones que nadie afirmaría que se parecen realmente a las estructuras planas observadas», afirma Merritt.
«Nuestra conclusión favorece un modelo alternativo, mucho más viejo que el estándar: que las satélites fueron robadas de otra galaxia cuando ésta interaccionó con el Grupo Local de galaxias en el pasado lejano», afirma. «Este modelo ‘de marea’ puede explicar de forma natural por qué las satélites observadas están en órbita en discos delgados».