Calculan con precisión la edad de las estrellas
13/5/2010 de SINC
Un equipo de científicos de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), del Instituto de Estudios Espaciales de Cataluña, del Instituto de Ciencias del Espacio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), de la Universidad Nacional de La Plata (Argentina) y de la Liverpool John Moores University (Reino Unido), encabezado por el investigador Enrique García-Berro, del Departamento de Física Aplicada de la UPC, ha demostrado que la edad de las estrellas enanas blancas del cúmulo galáctico NGC 6791 es de 8.000 millones de años y no de 6.000 millones, como se creía hasta ahora. Esta investigación abre nuevos caminos para profundizar en el conocimiento del origen del Universo y sus resultados se publican en la revista científica Nature hoy, 13 de mayo.
Los investigadores han calculado la evolución de las enanas blancas desde su nacimiento hasta la actualidad. Estos cálculos demuestran y confirman experimentalmente teorías que se habían anticipado pero de las que hasta ahora no existían pruebas observacionales. En particular, el equipo de investigación ha demostrado que la sedimentación de los elementos químicos más pesados, debida a la fuerte gravedad de esas estrellas, y la cristalización de los materiales, a consecuencia de las enormes presiones, tienen lugar en su interior. Estos procesos físicos liberan energía en el interior de las enanas blancas y retrasan su evolución, lo cual permite calcular con precisión la edad de este tipo de estrellas.
Los científicos han utilizado durante años la edad de las enanas blancas para estimar la edad de nuestra galaxia y de otros sistemas de estrellas, y la habían anticipado desde el punto de vista teórico, aunque existían grandes incertidumbres debido a que no se podía probar cómo se producían esos dos fenómenos en su interior. Nunca se había podido certificar mediante observaciones, de una forma independiente, la validez de sus teorías, ya que es imposible obtener en laboratorios terrestres las densidades y las temperaturas tan altas (de millones de gramos/cm3 y de millones de grados, respectivamente) de esas estrellas. Los cálculos de este grupo de investigadores han sido comparados con las medidas de la edad de NGC 6791 realizadas a partir de las imágenes del telescopio espacial Hubble y se ha podido comprobar que coinciden.