Es complicado: Dawn obliga a reescribir la historia del asteroide Vesta
7/11/2013 de JPL / Nature
Justo cuando los científicos pensaban que tenían una bonita teoría sobre cómo se formó el asteroide gigante Vesta, un nuevo artículo de la misión Dawn de NASA sugiere que la historia es más complicada.
Si la formación de Vesta hubiera seguido el guión de la formación de planetas rocosos como el nuestro propio, el calor del interior habría creado capas diferenciadas y separadas de rocas (en general, un núcleo, un manto y una corteza). En esa historia, el mineral olivina debería de concentrarse en el manto.
Sin embargo, tal como se describe en un artículo publicado en la edición de hoy de la revista Nature, esto no es lo que ha encontrado el espectrómetro de cartografiado en infrarrojo y visible de Dawn. Las observaciones de enormes cráteres en el hemisferio sur de Vesta, que dejaron al descubierto la corteza inferior y deberían de haber llegado a excavar hasta el manto, no muestran evidencias de que allí haya olivina. En lugar de ello, los científicos encontraron cuatro señales claras de olivina en material de la superficie en el hemisferio norte.
«La falta de olivina pura en cuencas profundas del hemisferio sur de Vesta y su descubrimiento inesperado en el hemisferio norte indican una historia evolutiva más compleja que la inferida a partir de los modelos de Vesta creados antes de que llegara Dawn», afirma Maria Cristina De Sanctis, coinvestigadora de Dawn, y directora del instrumento VIR en el Instituto Nacional de Astrofísica de Roma, Italia.
Quizás Vesta se fundió parcialmente, lo que crearía reservas de olivina en lugar de una capa global. Quizás la parte de manto al aire del hemisferio sur de Vesta fue cubierta posteriormente por una capa de otro material, lo que impidió que Dawn viera olivina bajo él.