NASA e investigadores internacionales obtienen datos cruciales del impacto de un meteoroide
7/11/2013 de NASA / Science
Un equipo de científicos ha reunido por primera vez información detallada sobre los efectos en la Tierra del impacto de un pequeño asteroide.
Los datos sin precedente obtenidos por la explosión en el aire de un meteoroide sobre la ciudad rusa de Chelyabinsk el 15 de febrero de 2013 ha revolucionado los conocimientos de los científicos sobre este fenómeno natural.
El incidente de Chelyabinsk fue bien observado por cámaras de ciudadanos y otro medios. Esto proporcionó una oportunidad única a los investigadores de calibrar el suceso, con implicaciones para el estudio de objetos cercanos a la Tierra (NEO de sus siglas en inglés), y desarrollar estrategias para mitigar peligros para la defensa del planeta. Científicos de nueve países han establecido ahora un nuevo banco de pruebas para crear modelos de impactos de asteroides en el futuro.
“Nuestro objetivo era comprender todas las circunstancias que provocaron la onda de choque”, afirma el experto en meteoros Peter Jenniskens, coautor de un informe publicado en la revista Science. “Era importante que realizáramos el seguimiento con ayuda de los ciudadanos que tenían experiencias de primera mano del suceso y que grabaron vídeos increíbles, mientras la experiencia aún era fresca en sus mentes”, afirma Olga Popova, del Instituto de Dinámica de Geoesferas de la Academia Rusa de las Ciencas de Moscú.
Calibrando las imágenes de video con las posiciones de las estrellas en el cielo nocturno, Jennisken y Popova calcularon que la velocidad de impacto del meteoro fue de 19 kilómetros por segundo. Cuando el meteoro penetró en la atmósfera, se fragmentó de manera eficiente en pedazos, alcanzando un máximo de fragmentación a los 30 km de altura sobre la superficie. En este punto, la luz del meteoro pareció más brillante que la del Sol, incluso a personas a 100 kilómetros de distancia.