Mejoran las oportunidades para establecer contacto de nuevo con Philae
4/11/2015 de Phys.org
Impresión artística del módulo de aterrizaje Philae de Rosetta sobre el cometa67P/Churyumov-Gerasimenko. Crédito: ESA/ATG medialab.
Las posibilidades de reiniciar el contacto con el laboratorio robótico europeo Philae van mejorando. Después de su accidentado aterrizaje el 12 de noviembre del año pasado sobre el cometa 67/P Churyumov-Gerasimenko, la sonda transmitió datos durante tres días y entró en hibernación cuando se le agotaron las baterías, el 15 de noviembre.
Pero a medida que 67P se acercaba al Sol en su órbita elíptica, Philae se recargó y despertó el 13 de junio. Estableció ocho contactos intermitentes con la Tierra a través de su nave nodriza, para quedar de nuevo en silencio el 9 de julio. El estado actual del robot del tamaño de una lavadora es desconocido.
En julio los controladores expresaron sus temores de que Philae se haya desplazado por la superficie y se encuentre fuera del rango de la radio. Otro riesgo es que los paneles solares hayan quedado cubiertos de polvo expulsado por 67P durante su máximo acercamiento al Sol en agosto.
Durante su paso por el Sol Rosetta tuvo que alejarse del cometa, fuera del alcance de la radio, para evitar daños en sus sistemas de navegación por el polvo procedente de 67P. A una distancia de unos 3000 km del cometa Rosetta se encontraba demasiado lejos para comunicar con Philae. Pero la actividad del cometa ha ido disminuyendo desde septiembre y ahora las condiciones son más favorables y puede de nuevo acercarse.
El martes el orbitador se encontraba a una distancia de unos 270 km del cometa, y continuará descendiendo hasta colocarse a 200 km, si todo va bien. “Estamos preparándonos para un nuevo contacto con Philae”, comenta Philippe Gaudon, de la agencia espacial francesa CNES. “Somos bastante optimistas”, añadió.
La ventana de comunicación debería de permanecer abierta hasta final de año. “A finales de diciembre o en enero empezaremos a llegar a una zona demasiado lejos del Sol para que sea posible la comunicación”, comenta Stephan Ulamec, responsable del proyecto.