Las “lupas” intergalácticas podrían ayudar a los astrónomos a estudiar los centros de las galaxias
1/7/2013 de Royal Astronomical Society
Un equipo internacional de astrónomos puede haber descubierto un nuevo modo de estudiar cuásares, las regiones centrales energéticas y luminosas que se encuentran típicamente en galaxias lejanas.
Si una estrella pasa demasiado cerca de un agujero negro gigante situado en el centro de una galaxia, será despedazada por el potente campo gravitatorio. Esto debería de producir una llamarada en el brillo de lo que de otro modo sería una galaxia de aspecto normal, que se apaga a lo largo de unos pocos meses. En un estudio a gran escala, el Prof. Andy Lawrence y su equipo estudiaron galaxias buscando este efecto, encontrando llamaradas, que se comportaban, sin embargo, de forma muy diferente a lo predicho.
En vez de verlos apagarse a lo largo de meses, los objetos que encontraron parecían cuásares “normales”, regiones en el centro de galaxias donde el material está girando alrededor de un agujero negro gigante en un disco. Los cuásares del estudio no fueron vistos hace una década, así que deben de ser por lo menos diez veces más brillantes que antes. También están cambiando lentamente, apagándose con una escala de tiempo de años en lugar de meses.
La mayor sorpresa de todas, sin embargo, fue que los cuásares parecían encontrarse a la distancia equivocada. Medir el desplazamiento característico en las líneas encontradas en el espectro de los cuásares permite a los astrónomos medir la velocidad a la que se están alejando de la Tierra. Conociendo el modo en que el Universo se está expandiendo permite a los científicos deducir la distancia a cada objeto. En el nuevo estudio, los cuásares se encuentran típicamente a unos 8 mil millones de años-luz de distancia, mientras que las galaxias que les albergan están a 3400 millones de años-luz de distancia. Podría ser que las distancias estimadas para las galaxias estuvieran equivocadas y que los agujeros negros del centro de las galaxias hayan aumentado de brillo dramáticamente. Pero estudios en el pasado de miles de cuásares bien conocidos nunca han mostrado sucesos a esta escala.
Si a pesar de todo, las distancias a las galaxias son las correctas, entonces el Prof. Lawrence y su equipo piensan que están viendo a un cuásar lejano a través de una galaxia que está delante. Normalmente esto tiene poco efecto sobre la luz del cuásar, pero si una sola estrella en la galaxia de delante pasa exactamente frente al cuásar, puede producir un enfoque gravitatorio de la luz que hace que el cuásar del fondo parezca, temporalmente, mucho más brillante.