Las mejores pruebas hasta la fecha de la teoría del calentamiento de la corona
3/9/2014 de NASA
El Solar Dynamics Observatory de NASA captó esta imagen del aspecto del sol el 23 de abril de 2013, cuando fue lanzada la misión EUNIS. EUNIS se centró en una región activa del sol, los arcos brillantes arriba a la derecha de esta imagen. Crédito: NASA/SDO
Los científicos han reunido recientemente algunas de las pruebas más sólidas hasta la fecha para explicar qué es lo que hace que la atmósfera exterior del sol sea mucho más caliente que su superficie. Las nuevas observaciones de temperaturas extremadamente calientes a pequeña escala están de acuerdo sólo con una de las teorías actuales: algo llamado nanofulguraciones, una constante andanada de explosiones de calor, ninguna de las cuales puede ser detectada individualmente, es lo que proporciona el misterioso calor extra.
La superficie visible del sol, llamada fotosfera, se encuentra a unos 6000 Kelvin, mientras que la corona alcanza de forma regular temperaturas que son hasta 3000 veces más calientes.
“Esto es una especie de rompecabezas” afirma Jeff Brosius, científico espacial de la Universidad Católica de Washington, D.C. y del Goddard Space Flight Center de NASA. “Las cosas normalmente se enfrían a medida que se alejan de la fuente de calor”.
Se ha propuesto diferentes teorías para explicar cómo la energía magnética que se desplaza por la corona es convertida en calor que aumenta la temperatura. Las distintas teorías hacen predicciones diferentes sobre el tipo de material y las temperatura que deberían de observarse, pero pocas observaciones disponen de una resolución suficientemente alta sobre un área grande para distinguir entre estas predicciones. El cohete EUNIS, sin embargo, estaba equipado con una versión muy sensible de un tipo de instrumento llamado espectrógrafo. Los espectrógrafos reúnen información sobre la cantidad de material que hay a una temperatura dada, registrando luz de diferentes longitudes de onda.