La inundación después del impacto
11/2/22014 de ESA
Grandes y pequeños, cientos de miles de cráteres arañan la superficie de Marte, excavados por una multitud de asteroides y cometas que han hecho impacto contra el Planeta Rojo a través de su historia.
Esta imagen muestra una región del hemisferio norte del planeta, conocida como Hephaestus Fossae – por el dios griego del fuego – que fue tomada por la cámara estéreo de alta resolución en el orbitador Mars Express de ESA el 28 de diciembre de 2007. La imagen ha sido coloreada para indicar la elevación del terreno: tonos verdes y amarillos representan suelo poco profundo, mientras que azul y púrpura corresponden a profundas depresiones, de hasta 4 km.
Dispersos por el paisaje se ven algunas docenas de cráteres de impacto que cubren una amplio rango de tamaños, con el mayor alcanzando un diámetro de 20 km.
Los largos y complicados desfiladeros que parecen cauces fluviales son el impresionante resultado de los mismos impactos terribles que crearon los cráteres más grandes. Cuando un pequeño cuerpo como un cometa o asteroide choca a gran velocidad contra otro objeto del Sistema Solar, la colisión calienta de forma dramática la superficie en el lugar de impacto.
En el caso del cráter mayor visto en esta imagen, el calor producido por tan fenomenal golpe fundió el suelo – una mezcla de roca, polvo y también escondido a cierta profundidad, hielo de agua – produciendo una inundación masiva que anegó los alrededores. Antes de secarse, este barro fluido excavó un complejo patrón de canales cuando se abría paso por la superficie del planeta.