Estudian meteoritos de asteroides para datar el impacto que formó la Luna
17/4/2015 de Southwest Research Institute / Science
Un fragmento de meteorito encontrado después de que un asteroide de entre 17 y 20 metros de tamaño penetrara en la atmósfera terrestre cerca de Chelyabinsk, Rusia, en febrero de 2013. La onda de choque producida por este episodio no sólo causó daños sobre una amplia área sino que también esparció meteoritos rocosos como éste. El meteorito es una condrita ordinaria (tipo LL5). Muestra dos partes diferenciadas, material fundido por impacto (parte oscura) y material condrítico original (parte clara). La parte fundida por impacto se estima que tiene alrededor de 4450 millones de años. Estas edades coinciden con la estimación de 4470 millones de años de edad para la Luna predicha por el modelo presentado en este trabajo. Crédito: Vishnu Reddy, Planetary Science Institute.
Un equipo de investigadores financiado por NASA y dirigido por el Dr. Bill Bottke del Southwest Research Institute ha estimado que la edad de la Luna es de casi 4500 millones de años, analizando señales producidas por el calor del impacto encontradas en meteoritos rocosos que se originaron en el Cinturón Principal de Asteroides. Su trabajo ha sido publicado en la revista Science.
El gigantesco impacto que formó la Luna, que tuvo lugar entre un gran protoplaneta y la prototierra, fue la colisión mayor y más reciente en el Sistema Solar interior que se conoce. Cuándo ocurrió, sin embargo, es todavía incierto. Las edades de la mayoría de las muestras lunares antiguas recogidas por los astronautas del programa Apollo todavía son objeto de debate.
Los investigadores emplearon simulaciones numéricas para demostrar que el impacto gigante probablemente creó un disco de material cerca de la Tierra que acabó agregándose para formar la Luna, al tiempo que eran expulsadas enormes cantidades de escombros fuera completamente del sistema Tierra-Luna. El destino de este material ha sido un misterio. Sin embargo, es posible que parte de él hubiera chocado contra otros mundos del Sistema Solar interior antiguo como los asteroides, dejando marcas en su superficie. Choques posteriores menos violentos entre asteroides podrían desde entonces haber ido expulsando parte de estos escombros de nuevo hacia la Tierra, en forma de meteoritos del tamaño de un puño.
Determinando la edad de las marcas en estos meteoritos los científicos fueron capaces de inferir que su origen probablemente corresponde a la época del impacto gigante y por tanto a la edad de la Luna. Así, los investigadores han deducido que la Luna se formó hace 4470 millones de años, lo que concuerda con muchas estimaciones previas.