Detección de vapor de agua en la atmósfera de un Júpiter caliente
25/2/2014 de Caltech
Aunque el agua líquida cubre la mayor parte de la superficie de la Tierra, los científicos todavía buscan planetas fuera de nuestro Sistema Solar que contengan agua. Investigadores de Caltech y otras instituciones han empleado una nueva técnica para analizar las atmósferas gaseosas de estos planetas extrasolares y han realizado la primera detección de agua en la atmósfera de un planeta con la masa de Júpiter, en órbita alrededor de la cercana estrella tau Boötis. Con instrumentos más sensibles y un mayor desarrollo, esta técnica podría ayudar a los científicos a averiguar cuántos planetas con agua – como la Tierra – existen en nuestra Galaxia.
El método empleó la técnica de velocidad radial, una técnica habitualmente empleada en la región visible del espectro a la cual nuestros ojos son sensibles, para descubrir planetas que no transitan por delante de su estrella. Usando el efecto Doppler, la velocidad radial determina el movimiento de una estrella debido al tirón gravitatorio de un planeta compañero; la estrella se mueve en dirección opuesta al movimiento orbital del planeta, y los patrones de luz estelares se desplazan en longitud de onda. Un planeta más grande o ás cercano a su estrella produce un desplazamiento mayor.
Alexandra Lockwood, Geoffrey Blake y sus colaboradores han extendido la técnica de velocidad radial al infrarrojo para determinar la órbita de tau Boötis b alrededor de su estrella, y añadieron un análisis más de los desplazamientos de la luz con espectroscopia – el análisis del espectro de la luz. Dado que cada componente químico emite en una longitud de onda diferente, esta única huella de luz permite a los investigadores analizar las moléculas que componen la atmósfera del planeta. En este caso, los investigadores fueron capaces de comparar con la señal molecular del agua en el espectro de luz emitido por el planeta, confirmando que la atmósfera incluye realmente vapor de agua.
«La información que obtenemos con el espectrógrafo es como escuchar una orquesta; escuchas toda la música junta, pero si atiendes cuidadosamente, puedes escuchar una trompeta o un violín o un violonchelo, y sabes que esos instrumentos están presentes», comenta Lockwood. «Con el telescopio, ves toda la luz junta, pero el espectrógrafo te permite elegir diferentes partes; como que esta longitud de onda indica que hay sodio, o esta otra, que hay agua».