Cuenta atrás final: Atlantis transportará una candidata a vacuna de última generación en su último viaje espacial
7/7/2011 de Arizona State University
El 8 de julio, alrededor de las 17:26 CEST, el transbordador espacial Atlantis se adentrará en los cielos partiendo desde la plataforma de lanzamiento 39A del Centro Espacial Kennedy, en su última misión. Aunque el vuelo STS-135 marca el final de los días de gloria del transbordador espacial, su viaje final puede abrir una nueva era de investigación de las enfermedades infecciosas, gracias a los experimentos espaciales realizados por Cheryl Nickerson, y Roy Curtiss III, junto con sus colaboradores del Instituto de Biodiseño de la Universidad Estatal de Arizona.
Nickerson, una microbióloga y autoridad en patógenos infecciosos, ha utilizado los vuelos espaciales o los análogos de vuelos espaciales desde 1998 como una plataforma exploratoria para investigar los procesos de infección. Su provocativo enfoque de la investigación en microbios ha pagado ya ricos dividendos. En misiones experimentales previas, el equipo de Nickerson demostró que las condiciones de microgravedad presentes en el transbordador espacial pueden incrementar potencialmente la capacidad de causar enfermedades de microbios como la salmonella, uno de los agentes principales en las intoxicaciones alimentarias.
Curtiis, director del Centro de Enfermedades Infecciosas y Vacunología del Instituto de Biodiseño, ha creado un nuevo vector de vacuna experimental que volará en el Atlantis en su viaje al laboratorio de la Estación Espacial Internacional. Eliminando los componentes causantes de la enfermedad de la salmonella, e incorporando un antígeno protector de streptococcus pneumoniae, Curtiis ha producido una potente vacuna oral contra la pneumonia, que ha mostrado su potencial en la fase 1 de pruebas clínicas humanas. La capacidad del vuelo espacial para aumentar la eficacia de esta vacuna de salmonella atenuada recombinante será el foco de la misión del Atlantis.