Cinco años después del lanzamiento, Juno se encuentra en un punto de inflexión
3/8/3016 de JPL
Ilustración artística de la nave Juno en órbita por encima de Júpiter. Desde su particular órbita polar Juno se zambullirá repetidamente entre el planeta y sus intensos cinturones de radiación constituidos por partículas cargadas eléctricamente, acercándose hasta 5000 km de las nubes. Crédito: NASA/JPL-Caltech.
Cinco años después de partir de la Tierra y transcurrido un mes desde que entró en órbita alrededor de Júpiter, la nave espacial Juno de NASA ha superado un punto de inflexión. El pasado 31 de julio Juno alcanzó el punto más alejado de Júpiter en su órbita, a 8 millones de kilómetros del planeta gigante. Tras este punto, el dominio gravitatorio de Júpiter sobre Juno provocará que la nave espacial empiece a caer de regreso hacia el planeta para volver a pasar por él, esta vez con sus ‘ojos’ científicos muy abiertos.
La nave se encuentra ejecutando la primera de dos órbitas largas anteriores al inicio de su misión científica. Cada órbita de captura dura casi dos meses, una gran espera para el ansioso equipo de científicos de la misión, aunque no es nada comparado con la larga espera que supuso el viaje hasta Júpiter.
Juno llegó a Júpiter el pasado 4 de julio, poniendo en marcha su motor principal durante 35 minutos, tal como estaba planeado. La maniobra ejecutada a la perfección permitió que la gravedad de Júpiter capturara la nave alimentada con energía solar, en la primera de dos órbitas de 53.4 días de duración, las llamadas órbitas de captura. Tras las órbitas de captura, Juno encenderá su motor una vez más para acortar su periodo orbital a 14 días e iniciar su misión científica.
Pero antes de que esto ocurra, el 27 de agosto Juno debe finalizar su primera vuelta alrededor de Júpiter, con una línea de meta que supone el paso más cercano sobre el gigante de gas. Durante el encuentro, Juno rozará Júpiter a solo 4200 kilómetros por encima de las cubiertas de nubes.